“¿Cómo sabes tanto si tuvimos los mismos profesores? ¿Será que seguiste estudiando mientras yo cerré los libros? Me uno a la sabiduría chilena que dice: Tonto callado se nota menos”.

Un compañero de andanzas por las choperas de Albelda de Iregüa me enviaba ayer esas líneas, sorprendido o de cachondeo, después de leer algunos de mis artículos.

Tengo que decirle a mi amigo, recuperado y reencontrado, años, pasados muchos años, gracias a mi página web, que con la sabiduría de las “Casas Centrales” no se puede ir muy lejos. Entramos con las alforjas vacías y salimos con las alforjas medio vacías, pero con muchas ganas de llenarlas en el campo de batalla de la vida . Yo creo que las hemos llenado y hasta desbordado.

El P. Balaguer, estrella fugaz en el Scío, exhortaba a los jóvenes a venerar y practicar las tres C: C de capilla, un pesebre para el espíritu, C de cuarto, un pesebre para la inteligencia y la C de comedor, un pesebre para el cuerpo. Algún atrevido añadía la C de cama, un pesebre para soñar sueños imposibles.

Unamuno decía que la mejor Universidad es una buena biblioteca. Tiene razón.

La sociedad recicla todos los días los residuos, los papeles, los cristales… Nuestro reciclaje no es un cursillo de diez días maravillosos, densos, turísticos, en una ciudad maravillosa. El reciclaje en el cuarto y en la biblioteca tiene ser, como la ducha, diario.

Hoy, amigo, no teologías, no cartas cartas a las iglesias, no citas judías, nada espiritual, hoy todo material y práctico. Hoy toca profanar la profanidad.

Los Escolapios, es decir, los Superiores Mayores, no han hecho voto de estabilidad, han hecho voto de movilidad. Y lo cumplen escrupulosamente. No necesitan que les escriba una carta apocalíptica, lo que necesitan urgentemente, soñaba yo anoche, es un avión.

Más de una vez he pensado, !qué locura, pensar!, a la vista de tanta necesidad de presencia en el escenario planetario, pronto será cósmico, que la Orden necesita un avión, nuestro Jet Privado.

El Papa Francisco no tiene un avión , pero Alitalia guarda uno en su hangar con la bandera blanca y amarilla siempre a punto.

El Commander-in-Chief de USA tiene su Air Force One, hotel de seis estrellas y búnker atómico.

Hoy, vivido el sueño en el simulador de la cama, he preguntado a Google, mi sabiduría enlatada: ¿cuántos Pastors tienen Private Jets?

Nueve, me responde, son nueve los predicadores de las Mega Iglesias que, además de valer muchos millones, tienen muchos más y se pueden permitir el lujo de tener sus Private Jets para ir de misión en misión, de revival en revival. Sus seguidores “diezman” de verdad y se toman en serio el Prosperity Gospel que les predican.

Sorpréndeme Google, por favor. Los Escolapios van mendigando, de aquí para allá, migajas para África y, big surprise, en África no sólo hay predicadores que tienen Private Jets sino que son más millonarios que los de USA.

Bishop David Ojedepo, hay más, del Winner`’s Chapel ha construido el mayor Auditorio del mundo, el Faith Tabernacle, capaz de cobijar a cincuenta mil personas. Tiene no uno, tiene varios Private Jets.

¿Para qué los necesitan? La Religión, las instituciones, el Moloch de todos los Templos necesita ser servido y alimentado. Los dineros y los negocios, escandalosamente visibles, son la punta del iceberg, el Espíritu y el evangelio esperemos que, aunque invisibles, estén ahí para que la punta del iceberg no se derrita en el océano insondable.

Me contaba un amigo y ex-feligrés de Soria que su “cura dominico”, su profesor y guía espiritual ha sido ascendido, tiene título Mayor, y ahora se pasa los días viajando. Imposible quedar con él.

La agenda, olvidemos la geografía kilométrica, de los Superiores Mayores, generales, provinciales, asistentes, ecónomos...la de todos los que tienen título, es apretada y más larga que la del mismísimo Jesús, aunque ciertamente menos inspiradora.

En mi sueño contemplaba un avión escolapio con un logo muy original, pero compartido, gobierno de concentración, con los jesuitas, los mercedarios, los salesianos, los menesianos y con las escolapias y las calasancias...todos abordo para ahorrar tiempo y gastos.

Terminaba el sueño despidiendo con una lágrima a todos los Superiores Mayores y deseándoles un Feliz Viaje.