Son muchos los objetos que han sido discontinuados.

Ya no escribimos cartas, enviamos wasaps.
Ya no vemos ceniceros en el bar, salimos a fumar afuera.
Yo ya no llevo reloj de pulsera, lo llevo en el móvil.

El Calendario, el del banco o el de la residencia de al lado, el de San Antonio o el de los camioneros siguen regalándose, pero resultan inútiles, lo llevamos en el móvil multiusos.

EL CALENDARIO del que quiero hablarles no es el de los 365 días, con mucho números en negro y unos pocos en rojo, ese rige nuestro trabajo y nuestro ocio, EL CALENDARIO del cristiano es EL CALENDARIO LITÚRGICO, el que nos recuerda que el tiempo es el corazón de la existencia, el que nos señala los tiempos sagrados.

La Biblia está más preocupada por el tiempo de Dios que por el tiempo del reloj y de la geografía.

Los que estamos uncidos a Papá Dios por la fe, vivimos, en el tiempo, el misterio de Jesucristo.

NOVIEMBRE 22 será para todos los católicos del mundo el último domingo de nuestro Calendario Litúrgico. Recapitulamos toda la Historia de la Salvación en la Fiesta de Cristo Rey.

NOVIEMBRE 29. ESTRENAMOS CALENDARIO.

FELIZ AÑO NUEVO.

Comenzamos nuestro AÑO con el Tiempo del Adviento. Dejamos las Lecturas Bíblicas del Ciclo A y comenzamos con las del Ciclo B.

A lo largo del Año nos acompañará el Evangelio de Marcos.

Dicen que un libro no debe ser juzgado por sus tapas sino por su primera línea.
La primera línea del Quijote la puede citar cualquiera: “En un lugar de la Mancha de cuyo nombre no me quiero acordar”...

“Todos los niños, excepto uno, crecen”, leo en Peter Pan.

La “Historia de las dos Ciudades” de Dickens comienza con una frase muy popular: “It was the best of times and it was the worst of times”...

¿Y la primera frase del Evangelio de Marcos?

“Comienzo del Evangelio de Jesucristo, Hijo de Dios”. Mc 1,1
Frase lapidaria, teología concentrada, que deberíamos, no sólo recordar, sino meditar.
Dios no tiene gramática, pasado, presente y futuro, nosotros sí. Somos un puñado de días, de meses y de años.
Vivámoslos bajo la mirada de Dios.

Bendito Tiempo de ADVIENTO.