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“En 2022, escribe Nancy Jo Sales, decidí alejarme de las pantallas y leer más libros. Fue maravilloso”. Yo, no en el 2022 sino en el 2010, deserté de la pantalla de TV e invertí, es maravilloso, mi tiempo en re-leer y escribir. La tentación de lo nuevo, de lo último superada, los viejos libros, dormidos en la estantería, que un día me deslumbraron han vuelto a re-vivir, a ser re-leídos una vez, dos…cinco veces y alguno diariamente. Los viejos no pretendemos vivir, lo nuestro es re-vivir y re-visitar el pasado, contar historias y anécdotas que a nadie interesan. No estaremos, ni falta que hace nos recuerda el Qohelet, en los archivos, cementerio donde yacen los muy muertos y donde los ángeles no se atreven a entrar. Lo mío es tiempo de re-leer. “Bienaventurado el que lee, y los que escuchan las palabras de esta profecía porque el tiempo está cerca”. Apocalipsis 1,3 De la biblioteca bíblica, el APOCALIPSIS de Juan de Patmos, corazonada apocalíptica, es el libro que leo todos los días. De memoria, by heart, lo quiero poseer. Abierto el libro, miramos más al futuro que al pasado, nunca nos bañamos dos veces en el mismo río, dijo el filósofo, la salvación no está en el pasado sino en el futuro. El pasado es mi ex, nostalgia boba. El Apocalipsis, breviario del que estuvo muerto pero vive, es mi GPS que me señala el camino del cielo y el de la tierra. Los cementerios de los archivos contienen miles y miles de comentarios, “la profecía es cosa divina, la exégesis es cosa humana”. Yo tengo la mía, me consuela, me da esperanza y me promete que comeré del árbol de la vida que está en medio del paraíso. Juan de Patmos, ausente, no te puedo entrevistar pero sigo haciéndote preguntas, ahora tu libro es mío y mi interpretación, para mí, es la verdadera. JUDAISM’S 10 BEST IDEAS. A Brief Guide for seekers, by Arthur Green Rabbi Laura Geller dice que su autor expone las ideas centrales de la tradición judía con los ojos del siglo XXI, las hace accesibles y fascinantes. Enseñanzas necesarias para los que comienzan el viaje judío y para todos los interesados en el judaismo.
Si Jesús de Nazaret, descendiente,
dicen, de David, hijo de Abraham, hijo de Dios, circuncidado y rescatado,
observante de la Torá, destetado con la Biblia Hebrea, fiel a la sinagoga,
peregrino a Jerusalén para la Pascua…leyera estas 10 enseñanzas, seguro que las
firmaría con su nombre y apellidos humanos y divinos. Confieso que la Cuarta y última Parte del libro es la que más me gusta, me gusta ¡qué vulgar expresión!
Oídos los gritos de socorro, SOS de
los hombres en busca de salvación, Zaratustra los cita a todos en su caverna
donde celebrarán la última cena y las catequesis del superhombre. Todas las religiones tienen sus libros sagrados, sus Biblias, su Corán, su The Book of the Mormon…y todos los países tienen su Homero, su Dante, su Shakespeare, su Goethe, su Pushkin, Cervantes… Francia tiene su Michel de Montaigne, autor de LOS ENSAYOS, precursor del nacimiento del individuo, de la filosofía de las luces, del progreso y de los derechos humanos. Y hay otro Montaigne “el de los lectores capaces”. Montaigne escribe sobre su relación con los libros: “Me consuelan en la vejez y en la soledad.
Me descargan del peso de una molesta
ociosidad, y me libran, a cualquier hora, de las compañías que me fastidian”.
“Me deleito con ellos como los avaros con sus tesoros, por saber que los gozaré
cuando se me antoje”.
Michel de Montaigne cita a los
clásicos como si con ellos hubiera convivido y estudiado. El amor, dios polifacético, farmacia abierta 24/7, dios entre las sábanas, en los parques, en las iglesias, cantado y pulpiteado, dios que nunca duerme… !Ojalá fuera el único dios invocado!. ¡Ojalá pusiera fin a todos los otros dioses! “No hay hombre tan cobarde a quien Amor no infunde el mayor valor y no lo convierta en un héroe”.
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